martes, julio 20, 2004

Noche de la Victoria (parte II)

Seguna y parte final del recuento de la Noche Victoriosa, erroneamente llamada Noche Triste por los hispanistas o hispanos.
 
Por: Miguel Angel Omaña Rojas
 
Los mexica comenzaron a lanzar flechas, dardos y piedras con rumbo a los españoles. Esto duró varios días hasta que un día Motecuhzoma subió a la azotea del palacio de Axayacatl y trató de calmar a su pueblo. Pero estos ya no le sentían respeto, ya que Motecuhzoma se había subordinado oficialmente a los reyes de Castilla, y volvieron a atacar.

 Motecuhzoma recibió algunas heridas, pero ninguna mortal. Por varios días, los españoles y sus aliados trataron de escapar de la ciudad de Mexíko, pero las arduas batallas no lo permitían. Se hicieron muchos intentos de derrumbar las paredes del Palacio de Axayacatl, pero nunca se pudo penetrar a la guarida española.

 Lo que verdaderamente afectó a los españoles fue la falta de alimentos y productos del mercado. Mientras Motecuhzoma y sus hijos continuaban presos, Cuitlahuac fue nombrado general supremo de los mexica y pidió apoyo militar a otras naciones.

 La desesperación de Cortés lo llevó a construir dos tanques de madera, los cuales los cubrirían de los ataques de las azoteas y templos, pero estos tanques fueron rápidamente hechos pedazos por los guerreros mexica.

 Al no tener solución, Cortés tenía dos opciones, seguir resistiendo hasta morir, o escapar de noche. Un joven español de apellido Botello, aficionado a la astrología, recomendó salir de noche. Al tener buena reputación con sus compañeros, Cortés ordenó salir durante la noche del 30 de Junio para ser 1ero de Julio (de 1520), ya que pensó todos estarían dormidos.

 La legendaria noche del 30 de Junio salieron los españoles del Palacio de Axayacatl, poniendo al frente a los tlaxcalteca aliados. Dejaron el cuerpo muerto de Motecuhzoma, el cual habría sido asesinado fríamente por los españoles, ya que este no les serviría mas para su seguridad personal y manejos políticos.

 Las tropas de Cortés cruzaron la metrópolis de Mexíko intentando llegar a la calzada de Tlacopan en medio de una tenue lluvia. Como la ciudad mexica era una isla, existían pocos accesos hacía suelo firme. Lo más conveniente para Cortés era llegar a Atzcapotzalco y su ciudad capital Tlacopan.

 A pesar de que los españoles se encontraron con unos guardias, una anciana lanzó gritos y avisó a los sacerdotes. Los sacerdotes subieron a sus templos e hicieron sonar los caracoles. Después todos los gigantescos tambores de la guerra se hicieron sonar, lanzando fuertes sonidos que harían temblar al más valiente.

 Cortés continuo cruzando la larga calzada de Tlacopan, pero al intentar cruzar el famoso Canal de los Tolteca, los soldados mexica a bordo de sus acalli (botes) quitaron el puente, y atacaron a los españoles. Cuando se encontraban cercados, el resto del ejercito mexicatl bajo las ordenes de Cuitlahuac aplastaron a las fuerzas extranjeras a orillas del mencionado Canal de los Tolteca. La lucha duró varias horas, después de que Cortés, Alvarado y su traductora Malinalli (Malinche) escaparan del feroz ataque cruzando el canal pisando la montaña de cadáveres que servían de puente. Al llegar a Atzcapotzalco, Hernán Cortes se arrojó sobre una piedra al pié de un ahuehuetl y lloró desconsoladamente su humillación.

 A pesar de que los mexica continuaron persiguiéndolos hasta amanecer, el fuerte del ejercito se quedó ya que al día siguiente habían descubierto los cadáveres de Motecuhzoma y muchos nobles dentro de la que había sido la guarida española.
 
Al finalizar el recuento de esta noche importantisima del 30 de Junio, a 484 años de la victoria del muy respetable Cuitlahuac sobre los hispanos y tlaxcalteca. Durante la transmisión del miercoles 30 de Junio de 2004, por XHNOE Stereo 91, 91.3 FM de Nuevo Laredo, nos enlazamos en vivo con la Universidad Tecnologica de Nuevo Laredo, donde los estudiantes utecos se juntaron para celebrar por vez primera en la historia de Nuevo Laredo, Tamaulipas, la historica batalla de la Noche Victoriosa (Noche Triste para los invasores), al frente del rector Fernando Vazquez Alanis, de la UT de Nuevo Laredo, o lo que es lo mismo, el Telpochcalli Tecnologico de Nuevo Laredo.