El miércoles 12 de Octubre de 1492 fue el macabro día en que exploradores a las ordenes de las sanguinarias cortes europeas “descubrieron” nuestro continente Ixachillan o Nxihmhöi, después renombrado impropiamente por los europeos como América. Grandes males enfermizos se hicieron contra nuestros pueblos por parte de los invasores. Pero la mayor preocupación hoy es que se recuerde esta negra fecha como un acontecimiento bueno, como si hubiéramos recibido algo positivo y provechoso. Mas nuestros ancestros indígenas presenciaron como les fueron destruidas nuestras lenguas, nuestros libros, nuestra memoria histórica, y la ordenada forma de vivir, seguido por el sufrimiento y la explotación (que hoy aún continua.)
Es triste que nosotros como descendientes de los Viejos Abuelos observemos el 12 de Octubre con ojos euro-céntricos, cuando tenemos la imperiosa necesidad de recalcar el holocausto cultural y humano que se llevo a cabo sistemáticamente por estos exploradores y sus sucesores. Monstruosos genocidios se vivieron durante la colonización, que en comparación empequeñecen las acciones de Adolf Hitler, Caligula, Pinochet y demás personajes cuya brutalidad es ya un hecho histórico, no siendo reconocido así con la caja de Pandora que abrieron la Niña, la Pinta y la Santa María.
¿Descubrimiento de América? ¿Viejo mundo y nuevo mundo?
Cristóbal Colón no descubrió este continente, ya que antes de él vinieron los Vikingos (quienes nunca vinieron en son de guerra), y todavía milenios atrás nuestros ancestros indígenas entraron a poblar estas tierras, concluyendo que nosotros mismos somos los verdaderos descubridores del continente de Ixachillan. Sin embargo el europeo no nos descubrió... ¿Qué acaso estábamos perdidos?
El viejo mundo para nosotros debería ser nuestro continente, ya que es en el que hemos vivido por innumerables milenios, y el novedoso en nuestro caso sería Europa. El hecho de nombrar nuevo mundo a esta tierra denota ignorancia, muchas veces por la falta de información. A menos que seamos europeos, el continente de Ixachillan es nuestro orgulloso viejo mundo, lugar donde florecieron las grandes naciones que nos legaron su cultura, y se enalteció al águila (cuauhtli), la serpiente (coatl) y al jaguar (ocelotl.)
El nombre de América prueba que la colonización cultural impuesta sobre nosotros continua, y en honor a nuestros ancestros, los Viejos Abuelos, tenemos que romper las cadenas y retomar nuestra memoria histórica. Antes le llamábamos a este continente Ixachillan en nahuatlatolli (lengua nahuatl), y en la neblina de la antigüedad lo nombrábamos Nxihmhöi en hñahñü (otomí.)
El 12 de Octubre nos despojó de la herencia de nuestros ancestros, distorsionó la historia, pisoteo nuestras tradiciones e implemento el decadente sistema occidental. Recordemos este día para hacer remembranza de lo que algún día fuimos, para poder saber a donde ir.